De un tiempo a esta parte vengo constatando dos evidencias tozudas y recurrentes que, a veces, me preocupan. Las dos tienen que ver con la seguridad y con la identidad digital:
- Es bastante difícil que quien no está acostumbrado a realizar copias de seguridad las realice.
- Es casi tan difícil que quien no se plantea una mínima seguridad con sus contraseñas de acceso se plantee cambiarlas o asegurarse que son robustas.
Para esto último pongo aquí dos sencillos recursos.
Mediante esta página podemos comprobar si las contraseñas que utilizamos son robustas. Se nos señalan una serie de indicaciones básicas y conocidas:
- La extensión de la contraseña.
- La alternancia de mayúsculas y minúsculas.
- La alternancias de signos numéricos y alfabéticos.
- La existencia de caracteres especiales.
Pero mediante las penalizaciones que establece, se dan también unas indicaciones valiosas:
- No debe haber dos tipos de caracteres similares que vayan seguidos, por ejemplo dos letras minúsculas o dos números.
- No se deben repetir caracteres y, si se hace, desciende el grado de robustez.
- Por supuesto se penaliza mucho que solo haya letras o números.
- Y no aparece, pero se descarta cualquier palabra que figure en el diccionario, pues son las más fáciles de caer en los ataques de "fuerza bruta" que realizan los programas rompe claves.
Naturalmente es un recurso que no mide al cien por cien la eficacia de una contraseña.
Este otro recurso me parece un poco menos fiable que el anterior, pero resulta muy efectivo, pues te señala el tiempo que se tarda en romper la contraseña que usas (se aconseja no poner la contraseña real, sino una parecida).
Tras poner la contraseña que queremos comprobar, la página nos devuelve una estimación de tiempo que tardará en romper la clave:
En el resultado que aparece en esta imagen se nos señala que se tardarían 4690 años en romper la clave. En la página anterior puse la misma contraseña (que tenía varios caracteres repetidos) y era valorada con un 0% en su fiabilidad. ¡Hay que tener cuidado con estas pruebas!
Ahora bien, me parece extraordinariamente valioso este otro recurso, relacionado no ya con las contraseñas, sino con el derecho al olvido en Internet y con la necesaria concienciación sobre lo que publicamos.
The Internet Archive es una organización sin ánimo de lucro, fundada en 1996, y que se fija como objetivo recoger el legado que se encuentra en la web.Tiene guardadas 404 billones de páginas (supongo que billones americanos). No tenemos más que poner la dirección web y nos saldrá el historial de copias y volcados realizados de esa página. Verdaderamente lo subido a la nube... permanece.